Siempre
rodeada por los medios de comunicación y envuelta en el entorno musical
que le legó su familia, siempre se ha sentido inclinada a ser una mujer
de negocios.
No
sólo el vestido que Stella McCartney utilizó en su boda, parecido al de
su madre Linda cuando contrajo nupcias con el ex Beatle, fue el legado
que le dejaron sus padres, sino el respeto al ambiente y la caridad que
absorbió de su entorno familiar. "Desde pequeña mi familia me
ha inculcado el cuidado a los animales, crecí en una familia con muchos
valores de ese tipo, en un ambiente vegetariano en el que se me
inculcaron el valor de la vida y el respeto al ambiente. Es por ello que
en esta etapa no puedo ir contra de mis principios", dijo Stella en
entrevista.
La diseñadora aprovechó su estancia para dejarse
influenciar por los elementos que ha conocido en el país, aunque siempre
ha marcado su propio estilo sin dejarse llevar por las apreciaciones
externas.
"Hoy visité el Museo de Arqueología y me pareció
fascinante, definitivamente podría incluir algo de la cultura mexicana,
los olores y las estructuras".
Siempre rodeada por los medios de
comunicación y envuelta en el entorno musical que le legó su familia,
siempre se ha sentido inclinada por convertirse en una mujer de
negocios.
"Desde pequeña siempre supe que quería dedicarme al
diseño, me gustaba mucho hacer mis primeros trazos, aunque de forma muy
prematura".
Al contar con varias marcas como apoyo, tal es el
caso de su alianza con CyA, para la que participó realizando prendas
accesibles para el mercado, aseguró que le encantaría contar con una de
las tiendas de su propia colección en este país.
"Es un hermoso país donde puede caber a la perfección y mi estilo, y me gustaría volver para su inauguración".
Durante
su carrera, se ha dado cuenta que muchos de los diseños se han llegado a
colocar como ciertas manifestaciones artísticas, pero en prendas no se
encuentra el mundo acostumbrado a verlo con una vital importancia.
"Veo
que el diseño de interiores y la arquitectura tienen otra visión, pero
no veo que se inclinen tanto por la vanguardia del cuidado del medio
ambiente y tienen una gran exposición en los medios actualmente".
Para
realizar su trabajo, la música, el cine y sus gustos personales son los
que se encuentran volcados, pero sobre todo su experiencia y la
intuición.
"Tengo un estudio en Londres, donde me encierro, pero
todo el tiempo estoy trabajando, pues me fijo mucho en las texturas de
las cosas, en su manera de combinarse y en lo que la gente usa".
Le
agrada ver que celebridades de la talla de Naomi Watts utilicen sus
colecciones, pero en realidad nunca le ha importado el estatus de las
personas que lo utilicen.
"Muchas personas usan mis prendas, eso
es lo que me gusta ver, que se sienten identificados con mi estilo, no
importa si son de algún medio o estrato", afirma.
Su
sofisticación y su particular manera de trabajar provienen de intereses
personales y en múltiples ocasiones ha referido que aún sin llevar el
apellido habría tenido este trabajo, pues desea prestar a las mujeres
una visión contemporánea.
"Constantemente me fijo en las
necesidades femeninas, me gusta que se puedan ver identificadas y
representadas con lo que hago, el concepto de feminidad ha cambiado y
ahora somos más intensas y con una energía muy radiante".
Su
familia siempre la ha apoyado y visto su desarrollo en el medio, incluso
su padre, sir Paul McCartney la ha acompañado a sus pasarelas y sus
muestras. "Me gusta que la gente se divierta en estos eventos y que
valoré el trabajo".
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