En un comunicado emitido por la Asociación Vegetariana francés, Paul, expresó su desaprobación de una regulación de control de alimentos servidos en los comedores escolares. El comunicado dice el reglamento "obliga legalmente a [los estudiantes] a consumir productos de origen animal."
Tras el comunicado, Paul dijo: "el reciente decreto del Gobierno francés sobre el cumplimiento efectivo del consumo de productos de origen animal en las instituciones públicas es un paso atrás para Francia. Va en contra de la Carta de Derechos Fundamentales de la Unión Europea al prohibir el derecho de los individuos a expresar sus creencias.
"No hay que comer animales - y podemos combatir el cambio climático y reducir el riesgo de sufrir enfermedades al corazón y otras enfermedades al reducir la cantidad de carne que comemos ".
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