El Bed-In un principio se pensó hacer en Nueva York, pero la condena a John por posesión de marihuana le prohibió mantenerse en Estados Unidos, obligándolo a cambiar de ubicación. Yoko fue quien sugirió ir a Montreal.
Ella recuerda: "Yo ya tenía un amor por la ciudad porque la había visitado, antes de conocer a John, en 1961 para un festival de música moderna". Tras la muerte de John, Ono dijo que llevó a su hijo a Canadá y al Reina Elizabeth Hotel para ver la habitación -la Suite 1742 - donde John y ella celebraron el bed-in del 26 de mayo al 1 de junio de 1969. "Yo quería comprender lo que vivieron", dijo sobre la protesta contra la guerra de Vietnam y en apoyo de la paz. En el último día del bed-in, grabaron Give Peace a Chance, que marcó el primer proyecto como solista de un miembro de The Beatles, mientras que la banda continuaba. Ono dice que a ellos les sorprendió el número de reporteros que fueron a cubrir el evento, y aunque ella dijo que casi permanecieron en la cama con ellos, la pareja nunca sintió haber sido invadido su espacio. "Fue increíble", dijo. "Estábamos tan enamorados, que queríamos compartirlo con todo el mundo." En cuanto a las drogas, no tuvieron lugar en el bed-in . Según testigos, solo bebieron vino. Este setiembre se cumplen 40 años del Concierto en vivo en Toronto, y fue la primera vez que John tocaba en un escenario sin los otros tres Beatles. "John estaba un poco nervioso, pero debo decir que estabamos más emocionados que nerviosos", dijo Yoko. "Fue magnífico". 
Así que después de 40 años, lo que queda de la pareja es un gran mensaje de paz, especialmente ahora con Estados Unidos en la guerra? Yoko dice al respecto:"Obviamente, John estaría mal al ver que nada ha cambiado". Hoy en día, Ono estima que el 99% de la población mundial quiere la paz, mientras que sólo el 1% sigue estando interesado en la violencia. Yoko no ha cambiado mucho, continua con el cuerpo de una adolescente y una risa infantil. John le dio el sobrenombre de "el Marciano", porque ella tiene una "gran cabeza y un cuerpo pequeño". Su apariencia es uno de los aspectos más llamativos de Yoko. El otro es su voz apenas audible, e inclusive, después de vivir tantos años en los Estados Unidos, su acento japonés sigue siendo fuerte. En cuanto a John, 28 años después de su asesinato, todavía detecta su presencia. "Él siempre está conmigo y creo que ese es uno de los motivos por los que puedo permanecer fuerte", dijo, y añadió que se siente con una energía proveniente de John. "A veces me pongo triste, pero las experiencias negativas son regalos también, y como dice el tema:"toma una canción triste y hazlo mejor. " "Es tiempo para la acción y la acción es la paz", dijo al término de la entrevista. Yoko definitivamente, no ha perdido su espíritu hippie. Source:jamcanoe.ca
Ella recuerda: "Yo ya tenía un amor por la ciudad porque la había visitado, antes de conocer a John, en 1961 para un festival de música moderna". Tras la muerte de John, Ono dijo que llevó a su hijo a Canadá y al Reina Elizabeth Hotel para ver la habitación -la Suite 1742 - donde John y ella celebraron el bed-in del 26 de mayo al 1 de junio de 1969. "Yo quería comprender lo que vivieron", dijo sobre la protesta contra la guerra de Vietnam y en apoyo de la paz. En el último día del bed-in, grabaron Give Peace a Chance, que marcó el primer proyecto como solista de un miembro de The Beatles, mientras que la banda continuaba. Ono dice que a ellos les sorprendió el número de reporteros que fueron a cubrir el evento, y aunque ella dijo que casi permanecieron en la cama con ellos, la pareja nunca sintió haber sido invadido su espacio. "Fue increíble", dijo. "Estábamos tan enamorados, que queríamos compartirlo con todo el mundo." En cuanto a las drogas, no tuvieron lugar en el bed-in . Según testigos, solo bebieron vino. Este setiembre se cumplen 40 años del Concierto en vivo en Toronto, y fue la primera vez que John tocaba en un escenario sin los otros tres Beatles. "John estaba un poco nervioso, pero debo decir que estabamos más emocionados que nerviosos", dijo Yoko. "Fue magnífico". 
Así que después de 40 años, lo que queda de la pareja es un gran mensaje de paz, especialmente ahora con Estados Unidos en la guerra? Yoko dice al respecto:"Obviamente, John estaría mal al ver que nada ha cambiado". Hoy en día, Ono estima que el 99% de la población mundial quiere la paz, mientras que sólo el 1% sigue estando interesado en la violencia. Yoko no ha cambiado mucho, continua con el cuerpo de una adolescente y una risa infantil. John le dio el sobrenombre de "el Marciano", porque ella tiene una "gran cabeza y un cuerpo pequeño". Su apariencia es uno de los aspectos más llamativos de Yoko. El otro es su voz apenas audible, e inclusive, después de vivir tantos años en los Estados Unidos, su acento japonés sigue siendo fuerte. En cuanto a John, 28 años después de su asesinato, todavía detecta su presencia. "Él siempre está conmigo y creo que ese es uno de los motivos por los que puedo permanecer fuerte", dijo, y añadió que se siente con una energía proveniente de John. "A veces me pongo triste, pero las experiencias negativas son regalos también, y como dice el tema:"toma una canción triste y hazlo mejor. " "Es tiempo para la acción y la acción es la paz", dijo al término de la entrevista. Yoko definitivamente, no ha perdido su espíritu hippie. Source:jamcanoe.ca
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